jueves, 30 de agosto de 2018

Running para combatir la artritis

A través de un estudio médico elaborado en la Universidad Thomas Jefferson de los Estados Unidos, se constató que el running disminuye las posibilidades de sufrir artritis debido al mayor desarrollo muscular, control del peso corporal y fortalecimiento óseo que caracteriza a los corredores que se ejercitan un mínimo de tres veces a la semana.

El equipo científico interdisciplinario de la ciudad norteamericana de Filadelfia comprobó este beneficio del running al realizar una encuesta internacional sobre la salud de las caderas y rodillas abarcando a 675 corredores cuyo entrenamiento semanal alcanzó un volumen mínimo de veinte kilómetros y, al menos, participaron en cinco competencias durante los últimos doce meses.

Patología menos frecuente

Los resultados de esta investigación concluyeron que la artritis es una patología menos frecuente entre los corredores en comparación con el porcentaje que alcanza en la población en general afectando al 17,9% de las personas sedentarias según datos oficiales del Centro Nacional de Estadísticas de Salud de los Estados Unidos.

El paso del tiempo es mejor llevado por quienes practican running porque, entre los corredores mayores de 65 años, la tasa de artritis llega al 24,5% casi la mitad de la población sedentaria de esa misma edad donde esta patología trepa al 46,6%.

Como conclusiones a un cuestionario sobre dolor en las articulaciones, antecedentes personales y familiares de artritis, historial quirúrgico e intensidad o exigencia de la actividad física, se determinó que el 47% de estos 675 corredores sufrieron molestias en la cadera o rodillas pero que sólo el 8,9% padeció artritis.

Este estudio médico se llevó a cabo entre 675 hombres y mujeres de 18 a 79 años que corren desde hace tres a diecinueve temporadas con un entrenamiento promedio de 58 kilómetros semanales.

La edad, la familia y el historial quirúrgico fueron factores de riesgo independientes para la artritis. Además, quedó demostrado que no existe una peligrosidad significativa ni siquiera mayores chances de inflamar las articulaciones debido al volumen e intensidad de la práctica del running.

RESULTADO DE IMAGEN PARA ARTRITIS RUNNING

Estas conclusiones médicas corroboran el resultado del estudio efectuado por la Universidad de Brighman Young en Utah, Estados Unidos, que comprobó que correr largas distancias de 15 a 42 kilómetros demora el surgimiento de patologías degenerativas de las articulaciones como la artrosis u osteoartritis ya que evita que se desgaste el cártilago del extremo de los huesos.

OTROS ESTUDIOS

De acuerdo con lo publicado en la revista European Journal of Applied Physiology, siempre que se trate de deportistas adultos y sanos, correr largas distancias no inflama las rodillas debido a que las moléculas proinflamatorias actúan de forma inversa al reducirse después de la actividad física.

A su vez, médicos canadienses de la Universidad de Queen en Ontario junto a sus pares estadounidenses de la Universidad de Maryland hicieron un seguimiento a 5.000 corredores de diferentes edades y niveles competitivos sin encontrar evidencia que el running incremente las posibilidades de padecer osteoartritis.

Al contrario, derribando un mito popular, se comprobó que correr disminuye las chances de contraer artritis en las rodillas en comparación con sedentarios.