viernes, 24 de febrero de 2017

CROSSFIT 3640 CELEBRÓ SU PRIMER ANIVERSARIO

Hace un año cuatro jóvenes emprendedores: Luis Sanjinés, Marco Salinas, Nazur Nemer y Óscar Navarro, abrieron las puertas de Crossfit 3640, en la zona de San Miguel, el primer club deportivo autorizado y supervisado por Crossfit HQ Washington DC.

Como en toda actividad, emprender un camino no es tarea sencilla, el gimnasio tuvo también sus altibajos, pero gracias a los campeonatos obtenidos en diversas disciplinas, Crossfit logró alcanzar un sitial importante.

Hace una semana, el centro deportivo celebró su primer aniversario junto a sus clientes, quienes días tras día cumplen una rutina de ejercicios de alto nivel en un tipo de entrenamiento compuesto por ejercicios funcionales, como parte del programa de fuerza y acondicionamiento físico general, para incrementar el fitness.

jueves, 16 de febrero de 2017

Sea una mujer espartana

Las reglas del método “Mujer Espartana” son sencillas: es un entrenamiento dirigido y exclusivo para mujeres y se enfoca en la realización de ejercicios localizados y de alta intensidad. “Es un programa único que se enfoca en las necesidades de la mujer”, destaca Marcelo Torrico, creador de esta novedosa disciplina y entrenador físico.

El programa está dirigido para aquellas mujeres que no quieran desarrollar una espalda o brazos “grandes” y por el contrario, busquen la pérdida de grasa corporal o ganar masa muscular, explica Torrico.

La novedad de Mujer Espartana, está en que se caracteriza por ser un programa personalizado únicamente para ella ya que considera que los objetivos a la hora de entrenar son diferentes en comparación con los hombres. "La variedad de ejercicios es lo que caracteriza a Mujer Espartana ya que durante el entrenamiento se trabajan zonas que desea trabajar como piernas, glúteos y brazos, pero, de una forma más personalizada y localizada", resalta Torrico.

¿Es el ‘jumping’ el nuevo ‘running’?

Le debemos mucho al running, no lo vamos a negar. Salir a correr se convirtió, en tiempos de crisis, en la mejor opción para tener una excusa y levantarse del sofá y aunque el gusanillo del running se le ha instalado en más de una, vamos a ser sinceras: no caló en todas nosotras. Correr requiere una voluntad especial, estar hecha de una pasta de la que no todos estamos hechos. Aunque para muchos supone el mejor deporte del mundo, para otros muchos solo supone un sacrificio que no son capaces de superar antes de ver la luz al final del túnel. Y, siendo honestos, tampoco estamos aquí para sufrir, sino para ponernos en forma.

Por ello, si eres de los que cree que el running no es para ti o eres runner, pero buscas una alternativa para variar, existe un ejercicio aeróbico tan bueno como correr, o incluso mejor, que está causando furor dentro y fuera de los gimnasios: saltar con soga. El ejercicio aeróbico es siempre una de las opciones preferidas a la hora de practicar ejercicio, ya que son los más efectivos para perder peso. Por ello, el running se convirtió de repente en el deporte de moda entre todos los que querían ponerse en forma, pero requiere un desplazamiento (los runners no suelen ser fans de correr indoor) y contar con una zona adecuada, a ser posible lo más libre de contaminación que se pueda. Por ello, los parques se masifican y resulta bastante incómodo salir a correr a determinadas horas. Si a todo esto le añadimos, además, las condiciones climatológicas que no siempre son las mejores, se necesitan muchas ganas para correr de forma regular y así obtener resultados.

Pero si eres de las que se sienten mal porque los días de frío te quedas en casa o porque, simplemente, correr no es lo tuyo, un estudio de la Universidad de Jena, en Alemania, ha descubierto que el jumping supone un ejercicio aeróbico que nos ayuda a quemar hasta un 24% más de calorías que correr.

SALTAR CON CUERDA

Saltar con cuerda es un ejercicio que ya forma parte del entrenamiento de muchas rutinas, como el boxeo y algunas artes marciales, ofrece resultados más rápidos y en poco tiempo.

Es el ejercicio perfecto para tonificar todos los músculos y ayudarte a perder peso, pero además mejora tus reflejos ya que aumenta la coordinación mano-ojo. Resulta ser bastante estimulante ya que pueden aprenderse varios patrones y rutinas de piernas que le dan algo más de emoción.

En realidad, el apostar por rutinas más o menos divertidas es solamente una cuestión de preferencia personal, ya que los beneficios siguen siendo los mismos.

SALTAR AUMENTA LA ACTIVIDAD CARDIACA

Al igual que correr, saltar aumenta la actividad cardiaca y pulmonar por lo que, poco a poco, también aumenta la resistencia. Es decir, la capacidad de realizar el ejercicio el mayor tiempo posible, que al combinar fuerza y trabajo hace que tu cuerpo responda de manera satisfactoria. Además se trata de un ejercicio compuesto, ya que intervienen muchos más grupos de músculos de los que crees, incluyendo piernas, brazos, abdomen y espalda y repercute de forma directa en tu bienestar, porque te ayuda a liberar tensiones, combatir el estrés y generar endorfinas.

Y es que en esto de las endorfinas, saltar tiene un papel especial y no de la misma forma que el resto de deportes. Eso de dar saltos de alegría no es solo una expresión más; un artículo recogido en la revista médica Elsevier demuestra que realizar movimientos asociados a la alegría, como saltar, hace que el cerebro genere emociones positivas. Además, al ser una actividad que solíamos realizar cuando éramos niños, la asociamos con sentimientos positivos de forma directa.

Eso sí, aunque no se requiere mucho equipamiento, prepárate antes de ponerte a saltar como una loca. Aunque el impacto que reciben tus pies, tobillos y rodillas es menor que el que sufren corriendo, utiliza un calzado adecuado para deportes de impacto y elige una cuerda que no sea ni muy corta, ni muy larga (entre los 2 y los 2,80 metros, dependiendo de tu estatura) y apuesta por ropa ajustada, ya que las prendas sueltas pueden resultar algo incómodas en este caso.

lunes, 13 de febrero de 2017

Ocho señales que te avisan que debes cambiarte de gimnasio


Existen incontables razones para hacer ejercicio y los gimnasios ganan cada vez más fanáticos del fitness. Pero no todo el mundo entrena contento y hay factores externos que pueden hacer que la rutina se vuelva insoportable.
El periódico español El País recopila algunos motivos para buscar un nuevo lugar para entrenar y María del Carmen Trigo, instructora y administradora de un gimnasio Premier, explica qué es lo que debes buscar.

1. El entrenador ni te mira.

Está claro que si quieres una atención personalizada, lo ideal es contratar un instructor para vos solo, pero los que trabajan allí también deben preocuparse por el bienestar de los clientes. “Un entrenador debe comprender las necesidades de cada persona porque no todos van para ser atletas profesionales sino para relajarse o entretenerse”, explica Trigo, añadiendo que los instructores deben velar por la seguridad de los clientes y estar atentos a todos por igual.

2. Está muy lleno y tienes que hacer fila.

Celulares y conexión gratis a internet, mala combinación para hacer deporte. En muchos gimnasios, además de sobrepasar la capacidad de alumnos por espacio, es común encontrar gente que pasa varios minutos en una máquina chateando, tomándose fotos o charlando entre amigos. Si lo que quieres es entrenar, mejor buscá uno que esté más vacío.

3. Qué pasa si te accidentas.

En un gimnasio pueden pasar muchos accidentes. Trigo recomienda que antes de inscribirte te asegures de que hay un botiquín para primeros auxilios y, en el mejor de los casos, un seguro médico para atender emergencias.

4. No encuentras las pesas.

El que ha ido a un gimnasio sabe que la ‘desaparición’ de las pesas chicas es moneda corriente, pero cuando esto se repite cada vez que las necesitas, el asunto puede acabar con tu paciencia. “Los instructores deben pedir a los alumnos que dejen las mancuernas en su lugar, pero la gente es muy desordenada”, asegura Trigo y dice que los profesores están para planear rutinas y ayudar a entrenar, aunque muchas veces tienen que ocuparse de recoger las pesas y ponerlas en su lugar.

5. Se pierden tus cosas.

No se puede hacer nada en un ambiente en el que no se confía. Si bien la instructora dice que los robos son poco frecuentes cuando los gimnasios tienen cámaras de seguridad, lo aconsajabe es asegurar las pertenencias y si se te pierde algo, es mejor buscar un lugar más seguro para entrenar.


6. ¿Antes muerto que ducharte ahí?

La higiene de un gimnasio es un factor clave. Lo ideal, explica Trigo, es hacer una limpieza profunda en las mañanas y hacer mantemientos durante todo el día, especialmente en las horas de más afluencia. “Debe haber personal para limpiar constantemente, vaciar los basureros y secar el piso de las duchas, especialmente en las mañanas cuando va más gente”.

7. No hay aire.

Hacer deporte en un ambiente cerrado y en el que el aire no circula, puede facilitar el contagio de enfermedades.

8. Hay muchas cosas rotas.

Es normal que los aparatos se averíen pero cuando son muchos a la vez, o dejan pasar meses para repararlo, afecta a la comodidad de los clientes. Mejor, busca otro lugar